Dorothea Lange
la fotógrafa del pueblo
Dorothea Lange es una de las fotógrafas más influyentes del siglo XX. Nacida en Mayo de 1895 en Estados Unidos en realidad se apellidaba Nutzhorn. Lange era el apellido de soltera de su madre el cual Dorothea adoptó como suyo.
Aprendió fotografía matriculándose en la escuela Clarence H. White de Nueva York. Estudió allí entre 1917 y 1919. En ese año abrió su propio estudio en la ciudad de San Francisco. Es allí donde comenzará a forjarse su personalidad como reportera social y fotoperiodista.
En 1918, después de recorrer el mundo, a su regreso se instaló en San Francisco donde abrió un estudio que la puso en contacto con la gente y determinó su vocación por la foto de reportaje. Conoció a Imogen Cunninghan y en 1920 se casó con el pintor Maynard Dixon con el que tuvo dos hijos.
La Gran Depresión por la que pasaba Estados Unidos llevó a mucha gente a vivir en las calles y a abandonar sus casas para buscar trabajo allá donde hubiera. Dorothea Lange estaba muy sensibilizada con esta problemática y usó sus fotografías como un método de denuncia. Empezó a retratar mendigos en las calles, desempleados, etc.
Con el comienzo de la Gran Depresión, Lange tornó el lente de sus cámaras de su estudio a las calles. Sus estudios de desempleados y gente sin hogar capturaron pronto la atención de fotógrafos locales y la llevaron a ser contratada por la administración federal, posteriormente llamada "Administración para la Seguridad Agraria" (Farm Security Administration). Su labor consistía en documentar la pobreza reinante en las zonas rurales del país.
En diciembre de 1935 se divorcia de Dixon y se casa con el economista agrario Paul Schuster Taylor, profesor de economía de la Universidad de California. Taylor forma a Lange en asuntos sociales y económicos, y juntos hacen un documental sobre la pobreza rural y la explotación de los cultivadores y trabajadores inmigrantes por los siguientes seis años. Taylor hacía las entrevistas y recogía la información económica, y Lange tomaba las fotos.
“Con su estudio de Arandas, Paul S. Taylor se convirtió no sólo en el pionero sino también en uno de los especialistas más destacados, y más originales, en el campo de los estudios migratorios entre México y Estados Unidos”.
Fue a Dorothea Lange, a quien le tocó documentar junto a otros fotógrafos el mundo laboral en la franja oeste del país, allí donde, en la segunda mitad de la década de 1930, trabajaban juntos blancos pobres, negros y los mexicanos que no habían sido expulsados. Entre las fotografías de la FSA ella destaca por su amplitud, calidad y calidez en el trabajo .
“Ella viajaba sin más agenda que su simpatía por los desafortunados, estacionaba su viejo Ford y esperaba, con la cámara y la mirada abierta”, dijo Willard Van Dyke.
Entre 1935 y 1939 Lange trabajó para departamentos oficiales, siempre poniendo en sus fotos al pobre y al marginal, especialmente campesinos, familias desplazadas e inmigrantes. Distribuidas sin costo a los periódicos nacionales, sus fotos se volvieron en íconos de la era.
Desde 1935 hasta 1940 trabajó para la Ressttiment Administration y la Farm Security Administration.
En esa época también colaboró con su esposo en la grabación de un documental sobre las consecuencias de la crisis del momento.
Dorothea Lange se hizo mundialmente conocida con su serie de fotografías titulada "Madre Migrante". Estas imágenes fueron tomadas en California en 1936. En ellas se ve a Florencia Owens Thompson y a sus tres hijos.
En 1960 Lange habló de su experiencia al tomar la foto:
“Vi y me acerqué a la famélica y desesperada madre como atraída por un imán. No recuerdo cómo expliqué mi presencia o mi cámara a ella, pero recuerdo que ella no me hizo preguntas. No le pedí su nombre o su historia. Ella me dijo su edad, que tenía 32 años. Me dijo que habían vivido de vegetales fríos de los alrededores y pájaros que los niños mataban. Acababa de vender las llantas de su coche para comprar alimentos. Ahí estaba sentada reposando en la tienda con sus niños abrazados a ella y parecía saber que mi fotografía podría ayudarla y entonces me ayudó. Había una cierta equidad en esto.”
Según el hijo de Thompson, Lange se equivocó en algunos detalles de esta historia, pero el impacto de la fotografía se basó en mostrar la fuerza y necesidad de los obreros inmigrantes.
Este conjunto de retratos definen claramente la personalidad del trabajo de Lange. Toma sus fotografías de manera cercana, clara, concisa y de una forma muy tierna. En ellas refleja la situación por la que están pasando las personas que retrata, pero sin hacerles perder un ápice de dignidad.
Para entender su método de trabajo hay que citar sus propias palabras : “Mi enfoque se basa en tres consideraciones : Ante todo : ¡Manos fuera ! Aquello que yo fotografío, no lo perturbo ni lo modifico ni lo arreglo, procuro representarlo como parte de su ambiente, como enraizado en él y sobre todo procuro mostrarlo como poseedor de una posición dada, sea en el pasado o en el presente”. Sus fotografías fueron incluidas y participó de la exposición “Vidas Migrantes México - Estados Unidos 1933-1943” del CIESAS occidente que se armó a partir de las fotografías de la Farm Security Administration que forman parte de la colección de la Mexican Migration Project y que es el resultado del proyecto de investigación iconográfica del Dr. Jorge Durand Arp-Nisen, Premio Jalisco 2004, de la Universidad de Guadalajara.
Las 16 fotografías que conforman esta exposición muestran el panorama de la migración de mexicanos a Estados Unidos a principios del siglo XX, a través de las cámaras de los fotógrafos John Collier, Dorothea Lange, Rusell Lee y Arthur Rothstein que generaron invaluables materiales gráficos acerca de los trabajadores mexicanos en esos años de la Depresión en Estados Unidos. En los recorridos por los estados de California, Illinois, Nuevo Mexico, Texas, estos cuatro fotógrafos documentaron la presencia y las condiciones de vida de los migrantes mexicanos y de su situación en las fábricas y las fundidoras, en el campo y las empacadoras, en las calles y los mercados, así como también en la vida doméstica, costumbres y fiestas.
En 1941, Lange recibió el premio Guggenheim Fellowship por la excelencia en fotografía. Después del ataque a Pearl Harbor, dio su prestigio para registrar la fuerza de la evacuación de los japoneses estadounidenses (Nisei) en los campos de concentración del occidente del país. Cubrió todos los actos de reubicación de los japoneses, su evacuación temporal en centros de reunión y los primeros campos permanentes. Para muchos observadores, sus fotografías de muchachas japonesas estadounidenses presentando honor a la bandera antes de ser enviadas a campos de concentración es un recuerdo de las políticas de detención de personas sin ningún cargo criminal y sin derecho a defenderse.
Sus imágenes fueron tan obviamente críticas que el Ejército las embargó. Dichas fotografías están en la actualidad disponibles en la División Fotográfica y la Biblioteca Bancroft de la Universidad de California.
En 1952, Lange fue la cofundadora de la revista Aperture. En las dos últimas décadas de su vida, su salud fue bastante pobre. Sufrió de problemas gástricos, úlceras y los síndromes del post-poliomilitis.
En 1955, publicó reportajes para Life Magazine junto a Ansel Adams y hasta 1957 realizó un estudio sobre el sistema judicial californiano. Desde 1958 hasta 1963, viajó por Asia, Venezuela, Ecuador, Egipto, Siria, Irak, Europa. A su regreso, al descubrir que padecía de cáncer se dedicó a preparar y organizar una gran retrospectiva de su obra en el MOMA y a documentar su vida.
En 1972 el Museo Whitney utilizó las fotos de Lange en una exhibición titulada "Orden Ejecutiva 9066" en la cual se resaltaba el internamiento de los japoneses estadounidenses en campos de concentración durante la II Guerra Mundial.
Murió el 11 de octubre de 1965 de cáncer a la edad de 70 años.
Dorothea Lange, la mirada de la Gran Depresión
«Un día cualquiera decidí que iba a ser fotógrafa. Haría fotografías sencillas de la gente, empezando por las personas que conocía. Nunca había tenido una cámara, pero eso era lo que quería hacer».
Es toda una declaración de intenciones de Dorothea Lange, sacada de una entrevista de 1964, un año antes de que un cáncer acabara con la vida de una de las grandes fotógrafas del siglo XX.
Destaca muy especialmente el encargo que le hizo el Gobierno norteamericano (la Farm Security Administration), dentro del proyecto de Roosevelt para salir de la Gran Depresión. «El Gobierno era consciente de la capacidad de la fotografía para transmitir un mensaje; era necesario hacer consciente al país de la difícil situación que estaba atravesando y de los proyectos que había emprendido para paliar tal situación». Se encarga a numerosos fotógrafos (entre ellos, Lange y Walker Evans) que recorran de 1935 a 1942 el país y den fe de lo que estaba pasando. «La fotografía se utiliza como instrumento de propaganda, es la primera vez en la Historia que un Gobierno se embarca en un trabajo de documentación fotográfica de esta envergadura».
Dorothea Lange se había dado cuenta de que «sólo estaba fotografiando a la gente que me pagaba por ello. Eso me molestaba». Había estudiado fotografía en Nueva York y en 1918 abría su propio estudio en San Francisco, donde pasó un tiempo centrada en retratos de estudio. Pero ella confiaba en sus instintos y el encargo del Gobierno le permitió sacar el gran talento que llevaba dentro para retratar el alma humana, su gran empatía con las personas que tenía ante su objetivo. Miles de personas obligadas a un éxodo en busca de trabajo a causa del paro, el hambre, la sequía... Aquel proyecto en el que documentó el éxodo de las familias de granjeros nos ha legado auténticos iconos.
Vemos el drama marcado en rostros desesperados de personas que vagan por las calles como fantasmas. Pero, a pesar de lo duro de la situación, Dorothea Lange, la fotógrafa del pueblo, confesó que halló el coraje en lugares inesperados: «Si pierdes tu coraje, pierdes lo más valioso que hay en ti, todo lo que te queda para sobrevivir».
En las instantáneas en blanco y negro, hay dramas humanos: familias enteras tiradas en la carretera cuando iban en busca de trabajo en los campos de algodón, rostros tiznados de niños que no entienden qué ocurre, refugiados de las sequías de Oklahoma y de Phoenix que esperan su cheque de subsidio, campos de trabajadores migratorios de Marysville, granjeros de Arkansas desahuciados... «En todos los escenarios su fotografía es humanista, con un estilo maduro, sabiendo enmarcar a los personajes en medio de las masas, utilizando los recursos de la Nueva Visión para hacer imágenes potentes, muchas de ellas de gran belleza estética, más allá de su carácter documental, con una tomas casi épicas, que muestran la esperanza en salir de la situación» así como la evacuación de los japoneses estadounidenses a los campos de concentración de la zona occidental del país. Algunas fotografías fueron embargadas por el ejército por su crudeza.
Durante 40 años, una cita del filósofo Francis Bacon permaneció clavada en la puerta del cuarto oscuro de Dorothea Lange. Rezaba así: «La contemplación de las cosas como son, sin error o confusión, sin sustitución o impostura, es en sí misma algo más noble que una cosecha entera de invención». Lange lo siguió a rajatabla toda su vida.
Fuentes:
http://es.wikipedia.org/wiki/Dorothea_Lange
http://www.fotonostra.com/biografias/dorothealange.htm
http://www.abc.es/20090601/cultura-cultura/dorothea-lange-mirada-gran-20090601.html
http://espacinsular.org/spip.php?article4080
Para saber más:
http://fotocolectania.wordpress.com/2012/03/22/in-focus-dorothea-lange/
http://www.mundo-geo.es/gente-y-cultura/exposiciones/fotoperiodismo-de-pobres-y-vagabundos
http://www.ciudaddemujeres.com/mujeres/Fotografia/Lange.htm
http://www.elangelcaido.org/fotografos/lange/lange.html
https://www.youtube.com/watch?v=KQPS3KI5-yM
Muy buen trabajo Jose.
Mil gracias.